Sin duda Chile posee un sinnúmero de paisajes exóticos, una capital cosmopolita y una oferta gastronómica sin igual. Pero hoy les comparto un verdadero paraíso, su real, cual salido del mundo mágico de Alicia en el país de las Maravillas, quiero mostrarles un poco de lo que conocí en el hermoso viñedo Tarapacá.
En un viaje previo a este hermoso país, pude constatar que en el corazón chileno se encontraba un vino muy especial, amado por el pueblo y poco conocido en nuestro país, me refiero a los vinos de Tarapacá, varios años han pasado desde que he deseado visitar esta región, que sin duda ha sido de las experiencias más hermosas que he vivido.
El mundo del vino
Si bien Chile posee un gran número de viñedos, nos adentramos a una de las zonas vitivinícolas chilenas más renombradas, el Valle del Maipo, una zona abrazada por la impresionante Cordillera de Los Andes.
Días antes de mi viaje, me contacté con la señorita Claudia Díaz, quien me ayudó a coordinar mi visita, incluyendo el transporte desde el bello Hotel Park Plaza.
La aventura comenzó pasada el medio día, donde la muy agradable y educada señora Carolina Rivera -Wine Ambassador-, junto con su adorable hija, pasaron por mí al Park Plaza. Desde el inicio del viaje la Sra. Rivera quien dicho sea de paso, vivió varios años en nuestro país, no tuvo reparo en compartir conmigo su experiencia en el mundo vinícola, incluyendo sus años viviendo precisamente en el viñedo Tarapacá.
A tan solo 45 minutos de Santiago, luego de pasar la ciudad de Chile, cambiamos los grandes edificios, las autopistas y los centros comerciales por enormes montañas, increíbles plantaciones de álamos y viñas, hasta llegar a la entrada del viñedo, donde despúes de un camino lleno de paisajes y colores hermosos llegamos finalmente a las instalaciones del viñedo, literalmente a las faldas de la Cordillera de Los Andes, fuimos recibidos en una impresionante casa estilo toscana que engalana la propiedad de 2.600 hectáreas, de las cuales 600 son viñedos.
Conocimos a mis dos anfitrionas de esa tarde, ambas de nombre Carolina, quienes me atendieron en forma encantadora y lo que inicialmente era tour privado de 1 hr se convirtió en una placentera tarde otoñal, donde disfruté de una sobresaliente hospitalidad y excelente servicio.
Empezamos conociendo la planta donde se procesa el vino, donde se nos explicó cómo el clima típico de Chile es tipo mediterráneo, que se caracteriza por veranos cálidos y secos e inviernos fríos y lluviosos, lo que es muy beneficioso para el crecimiento de las vides. La temporada de crecimiento es generosa en días brillantes y soleados y en temperaturas que decrecen fuertemente por las noches. Esta oscilación térmica es importantísima para las uvas viníferas para desarrollar sabores de fruta fresca, acidez crujiente y, en el caso de los vinos tintos, un color profundo, taninos maduros y altos niveles de antioxidantes.
El clima
Las lluvias se concentran en la época invernal y hay una larga estación seca que va desde el final de la primavera hasta fines del verano, todos estos factores originan una intensa actividad fotosintética diurna y un adecuado descanso nocturno de la vida, lo que se traduce en una gran acumulación de color y aroma en la uva y una maduración perfecta, difíciles de encontrar en otros países.
Asimismo, Chile posee condiciones extraordinarias para la sanidad de las uvas. Los veranos secos y la falta de lluvias en el período de crecimiento activo de la parra, sumados a las barreras geográficas naturales que constituyen el Océano Pacífico y la Cordillera de los Andes, hacen muy bajo el índice de enfermedades.
Luego visitamos la sala de guarda con más de 8,500 barricas de roble francés y americano (dedicadas a la producción de vinos finos), una cava con mucha misticidad; y Carolina nos comentó los planes de expansión futuro de Tarapacá, pues aunque su énfasis está en la elaboración de vinos provenientes del prestigioso Valle del Maipo, el afán de buscar los mejores terroir para cada cepa, ha llevado a la compañía a ampliar el origen de sus vinos hacia otros valles chilenos que han adquirido gran reconocimiento. Algunos de ellos son los Valles de Casablanca y Leyda, entre otros.
Después de este interesante recorrido, subimos al museo donde observamos una sala llena de medalles, galardones y premios otorgados al viñedo desde su fundación en 1874, vimos las primeras máquinas para sacar corchos y otras para crear dichos corchos; hasta llegar a una sala donde nos esperaba la cata de vino acompañada por frutos, semillas, quesos y carnes frías.
Degustamos primero un Gran Reserva Chardonay, fermentado en barricas con sus lías para añadir riqueza y complejidad. Aromas florales de nectarín y damasco junto a notas tostadas de mazapán, durazno blanco y refinadas notas con sabores ricos y complejos. Posee un final largo, dulce y cremoso, muy rico en el paladar.
Luego disfrutamos del Gran Reserva Syrah, impresionante color rojo violeta brillante; intensos aromas de frutas moradas frescas, tales como arándanos y ciruelas, junto con suaves notas herbáceas. En el paladar presenta estructura media, con sabores a fruta roja jugosa y taninos suaves, me encantó, fue mi favorito.
Terminamos con un vino Gran Reserva Cabernet Sauvignon, criado en barricas de roble francés y americano por 16 meses; presenta un color rojo violáceo, aromas de hojas de tabaco, hongos y berries secos, junto con un delicado toque mentolado. En boca es rico, lleno de sabores de fruta negra junto con toques de hierbas, notas de regaliz y especias; taninos firmes y acidez balanceada; fue muy sorprendente para mí pues a diferencia del Cabernet Sauvignon que he probado que se caracteriza por un carácter fuerte y seco, éste vino Gran Reserva era suave y con cierta jugosidad al final en el paladar.
El tour terminó con un recorrido a la casa toscana y sus alrededores, una casa hermosa con 19 habitaciones, las cuales puedes disponer para grupos vacacionales, con un mínimo de reservación de 10 personas, te aseguro que vale mucho la pena, sin duda tu visita a Chile no será igual sin una parada o estadía obligatoria en el paradisiaco Tarapacá.
No dudes contactar a Claudia Díaz cldiaz@vspt.cl y organizar tu recorrido con Carolina Rivera wineambassador4u@gmail.com altamente recomendadas.
Gracias por visitar nuestro blog!; no te pierdas detalle de nuestro próximo post, una visita al Costanera Sky Center, la torre más alta de Latinoamérica.
Chris Q.